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Goiko, López y Enbil, “El tridente de Zumaia”

Bilbao Jai Alai reúne a los tres “cracks” de la cesta

21/09/2011: Estamos ante un día un tanto nublado, pero aún así, vemos bastantes personas en la playa de Zumaia, algunas de ellas paseando, otras tumbadas en la arena y alguna incluso bañándose. El primero en llegar a la cita ha sido el ocho veces campeón del Individual Iñaki Goikoetxea. Él es el que me recibe y ejerce de anfitrión. “Mira, ése es el famoso Flysch de Zumaia”. Mientras charlamos, aparece Imanol López, con quien Goiko ha ganado el Campeonato del Mundo de Hossegor y un poco más tarde llega Gotzon Enbil, cinco veces campeón mundial y que completa “El tridente de Zumaia”, formado por los tres mejores puntistas del planeta. Con ellos compartí un trago, unas vistas incomparables y muchos minutos de amena conversación.

López es el más extrovertido del trío, y además es, de los tres, al que he entrevistado en menor número de ocasiones, por lo que no duda en rememorar su carrera de principio a fin. “Los tres coincidimos en Euskadi del 2003 al 2005 y recuerdo que mi primer partido lo disputé con Goiko, contra Konpa-Irastorza. Perdimos 35-30, pero ganamos el Villa de Gernika. En Bilbao también vencí, fue con Goixerri, contra Diego-Jon Arriaga”, indica Imanol, quien admite que en Zumaia se siente a gusto, “aunque luego voy a América y también disfruto lo de allí, o sea que los ocho meses en Florida se pasan rápidos y estoy contento en los dos lados”. Para Enbil, en cambio, la espera ha sido un poco más dura, ya que “Maite, mi mujer, se vino a casa con el niño seis semanas antes y ese periodo de tiempo que estuve sólo se me hizo largo”.

Cuando hablas con estas tres figuras es inevitable referirse a su experiencia americana y a las diferencias existentes entre las quinielas y los partidos. Para López, “los encuentros son más duros físicamente, pero mentalmente yo creo que es igual jugar aquí o allá”. “No, yo pienso que mentalmente es más difícil lo de América”-apunta Enbil-, quien encuentra respuesta en Goiko: “Bueno, es que si cada día ganas tres quinielas, como hace Imanol, pues mentalmente lo llevas mejor, je, je”. “Sí, pero cuando atraviesas una mala racha es complicado dar la vuelta a la situación. Sucede como aquí, que cuando pierdes tres partidos seguidos lo pasas mal”, dice López.

Enbil ha compartido este año cuadro en Dania con el último vizcaíno en dar el salto a los Estados Unidos, como es el caso de Ibon Aldazabal, de quien comenta que “anda bien, pero el primer año siempre cuesta algo. No obstante, tiene todo para jugar y rendirá a buen nivel”. En este punto, Imanol recuerda el primer tanto que disputó en Florida, donde “sacó Hernández y cuando fui a restar, la pelota me pasó la pelota”, “pues yo ni te digo la de puentes que me comí al principio, je, je”, añade Gotzon. “Es que durante los primeros seis meses, todos sufren allí, y cuando vienes de América a Euskadi, también notas un cambio grande”. “Yo creo que es más complicado el ir de aquí a Florida. Yo marché con 24 años y se paga la novatada”, le comenta Enbil a López.

Más curioso fue el debut de Goiko, que tuvo lugar en Milán, donde jugaba “unas quinielas de delantero; y otras, de zaguero. Cuando me ponían atrás no llegaba ni al siete, je, je”. Imanol también sabe lo que es variar su puesto, puesto que una vez, Chato Agirre “me puso de delantero de Zubeldia para jugar contra Hormaetxea-Etxabe. En Acapulco también disputé una exhibición de delantero con Valdés, el zaguero. Es que me dijo que él no sabía ni sacar, o sea que yo me puse adelante y ganamos. Ahora ya me pondría algún día de delantero, pero con alguien que no me entrara al saque, je, je”.

México y Estados Unidos no son los únicos paises que conocen estos puntistas, puesto que a lo largo de la charla, Enbil nos habla del Campeonato del Mundo sub’22 que tuvo lugar en Cienfuegos (Cuba) y en el que tomó parte. Donde no ha competido ninguno de ellos es en Asia, donde “estaría bien disputar un torneo de diez días o así”. De hecho, allí se encuentran varios zumaiarras que son amigos personales este trío y que han entrenado en numerosas ocasiones con Imanol López, puesto que algunos son prácticamente de su edad.

La conversación se mantiene aprovechando lo tarde que anochece en verano y la agradable brisa que corre en Zumaia, en cuya playa precisamente estuvo trabajando Goikoetxea cuando tenía quince años, tal y como nos confiesa Imanol. Ninguno de ellos tiene aún niños, pero el hijo de Enbil, con apenas año y medio, “ya tiene una cesta pequeña”. No obstante, su aita nos matiza que “el hará lo que quiera y ya se verá si quiere hacer deporte o a ver qué sucede”. “Deportista seguro que sale”, vaticina López. Si es así, tal vez haya que entrevistarle después de un partido de cesta en el futuro frontón de Zumaia. Quién sabe.

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Texto: Juan Luis Ibarretxe Marcos

Pie de foto: Fotografías de López, Enbil y Goikoetxea, en la playa de Zumaia, con el mar y el Flysch al fondo